Mientras empezábamos el fueguito, Seb se dedicó a limpiar un poco su "vivienda", mientras que se armaba la cancha de badmington.
Por las dudas:
Mientras la carne comenzaba a ponerse doradita, Sebastien deslumbraba a todos con el relato de su viaje:
El almuerzo fue bien regado con vinito y con cerveza Quilmes ( vean la cara de Seb)
Considerando que estaba anocheciendo y que estaba relindo, decidimos quedarnos. Nunca sabremos lo que quedó inmortalizado en esta foto, mientras pensabámos que hacía falta para cenar allí.
Armamos otro fueguito y armamos unas hamburguesas. Los chicos se encargaron del fuego y lo mejor estuvo en la musicalización de Nadia, con sus hits europeos.
Más tarde, se produjo la ceremonia formal del casamiento de los Dassouille bajo la protección de Ámbar.
Luego de más brindis y promesas, levantamos campamento.
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