En la residencia Aldaz, la inauguración del chill out. Ese espacio especial para relajarse y descansar ( porque siempre estamos muy cansados1) en buena compañia y alejados del mundanal ruido ( bah...de los muchachitos)
El regalo que Biyi pensó que le iba a gustar a Damián era una patchwork, que lo abrigará en las noches frescas. Así que con los recortes que tenía, le armamos esta frazadita.
La nota que explicaba el sentido de la obra es éste:
Este obsequio fue gestado en una trasnoche de diciembre, igual a muchas otras. Luego de comer unos suculentos choripanes regaditos con buen vino, champú, etc. etc., Damián decidió entrar en un sublime momento de meditación y relax.
Fue allí cuando cayó en cuenta, que debería haber puesto un poquito más leña en el fueguito para que lo entibiara un poco. Acomodose en la reposera y manoteó un repasador que estaba a su alcance y comenzó a pasearlo por el pecho, por el abdomen y por las rodillas. Finalmente se tuvo que levantar y trajo dos repasadores más de la cocina, cubriéndose de esta manera todas las partes anteriormente mencionadas (pecho, abdomen y rodillas). A pesar de esto, todavía sentía frío.
La atenta observación de los presentes, le hizo ver que había cierta analogía con el trabajo manual que se realiza con parches de tela que se unen entre sí formando diversas figuras. Entonces, alguien le dijo:” ¡Damián, pareces un patchwork!. Al oír esas palabras le brillaron los ojitos y exclamó:” ¡Me encanta, eso es lo que me hace falta!”.
A partir de ahora, lo llamaremos Mr. Patchwork y es este acto solemne, le hacemos entrega del trabajo manual homónimo que, esperamos, reemplace a los repasadores.
Fue confeccionado, teniendo en cuenta su personalidad, su carácter, su vocación y sus gustos.
Pueden apreciarse sectores con flores, que están de acuerdo con su espíritu romántico. Los rayados recuerdan sus amados pantalones y sus ocasionales manifestaciones explosivas, al igual que los cuadros, donde dichas manifestaciones corren en los dos sentidos.
Hay también referencias a su ideología política, ya que está el gorrito pochito que recuerda al Gral. La miel representa al pote de cartón de su dulce de leche preferido; el barco, espíritu aventurero, marca uno de sus más anhelados deseos. El corazón con la palabra amor, es símbolo familiar donde se encuentra su mujer y sus hijos (en ese orden). El insecto en vuelo es su alma inquieta, curiosa, en un permanente afán de superación; las pantuflas y la taza muestran el bienestar y la paz que él siente en su hogar. El bolsito es placer y las ansias que tiene por viajar, pero que ahora está vacío y sin euros. Los dos ositos abrazados significan la amistad que cultiva con dedicación y su característica de excelente anfitrión.
El monograma hace que este regalo sea personal de Damián Aldaz (así no lo confunden más con el de Trono).
El rojo, ya desde la antigüedad, sabemos que es el color de la nobleza, ya que en nuestro caso es el caso del Rey de los Asados (o sea que es King Patchwork) y además es el color de la escudería que
lo apasiona (… y ruge la Ferrari…)
El amarillo representa el sector de cerebro que indica la actividad creativa, estética y artística y lleva una P en rojo pasional que simboliza su actividad como: Papá, Pintor, Plástico, Parrillero, Pitcher en algunos momentos, su querido Putter del golf, además de ser la P de Pedos que se agarra de vez en cuando y los Pedos Pulzudos que suela tirarse y la P de Pelotudo, a veces…
Por todo esto, a partir de ahora, todos los 20 de diciembre recordaremos al Día del patchwork, que por razones obvias de confección se te entrega, en este día 24, tan especial.
Dos que te queremos mucho.
Lincoln, 24/12/2010
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