viernes, mayo 15, 2009

La música de la Peña

El mismo sábado, pero por la niche actuó Fernando Picado en Lincoln, como músico invitado en el Primer Festival de Jazz de Lincoln.




Con los álvarez, concurrimos (los Cabanis) a la sede de Gidi. Allí esperamos ansiosos la participación de Fernando. Los grupos que tocaron antes realmente nos sorprendieron muchísimo.
Y aquí el momento de "Nota gris".



Y más:

Nuevo hit de la Peña

Composición musical con letra y música de Américo:

miércoles, mayo 13, 2009

Festejo del Día del trabajador

El sábado 2 de mayo nos reunimos en el quincho de Manuel Alegre, para festejar el Día del trabajo y el primer encuentro después del viaje. Estuvimos todos presentes desde el mediodía. Hubo como simpre picada ( ¡gracias, Gustavo!), asadito, y supertorta de Adri. Damián pidió especialmente esta foto para David, así que ¡aquí está! Así tomamos mate en la Argentina. A la tarde, continuamos la charla y las risas, para ejemplo este videíto:

La causa era una guerra acuática entre Damoán y Joli.



A la tardecita y cuando se acabaron las provisiones, partimos. En realidad, hasta los vasos se rajaron por el uso.

Videítos varios

Bruno haciendo rappel
Cabalgata en las Verbenas
Champagne en el Río Grande

Último día de vacaciones entre amigos.




El domingo nos levantamos temprano para empezar el regreso. Desayunamos y nos dedicamos a lo pendiente; buscar cactus y piedras, rescatar las botellas que habían quedado, comprar los alfajores y dulces reglamentarios, ets.
Cargamos los autitos y nos organizamos igual que a la ida. Analía nos organizó unos sandwichs de milanesa, para no desfallecer de hambre.
El único inconveniente fueron las curvas y contracurvas que descompusieron a los chiquititos, por lo que tuvimos que parar seguido.
Paramos a almorzar, y llegamos a Lincoln a eso de las 18.30 hs.
Fue el final esperado de un viaje fantástico.

martes, mayo 12, 2009

Dios los cría y ... los amontona

Mientras los chicos hacía el rappel, y el resto se mordía los codos, los hombres ( Damián, Gus y Guille) se dedicaron a cumplir una misión: conseguir un lugar en donde comprar hielo, para amenizar la espera con una de las botellitas que cuidaban en el bodega-móvil. Recorrieron algunos almacenes sin éxito, hasta que alguien coment´p que en un almacén/bar/boliche probablemente vendieran...
Hacia allí fueron.
Damián encaró pero sólo encontró a un ameno grupo de parroquianos que hacía lo que se hace en cualquier boliche del planeta Tierra: chupar.
Como allí no había hielo, le contaron que enfrente probablemente shí habría. Efectivamente, lo consiguió y comenzó la vuelta hasta el auto que había quedado a dos cuadras.
La sorpresa fue ver que alguien lo seguía. Cminaba zigzaguendo de vereda a vereda, como siguiera el rastro de algo.
Al ir llegando, Gus se dio cuenta de la situación por lo que tomó una ubicación de defensa del botín: se sentó contra la puerta del baúl.
Damián al ver al hombre más de cerca vió quien era:uno de los parroquianos del boliche que con toda cortecía le pedía plata. Mientras, Guille intentaba fabricar un vaso, por lo que el amigo, insistió en que le dieran algo. Luego de cargar el vaso, Damiçan le ofreció lo que quedaba en la botella, para la alegría del caballero.
Creo que pocas veces, se dan estos casos, pero confirman el hecho de "Dios los cría...". Cuando nos contaron lo sucedido, decretamos que ese hoembre es un miembro honorario de la peña en La Carolina.

Sábado en Las Verbenas

Después del desayuno, decidimos ir hasta el túnel de la mina que estaba cerca de la hostería. Para los chicos fue muy divertido, porque estaba inundada y era divertido para ellos chapotear en el barro. En fin...



Despues fuimos para el otro lado, porque nos dijeron que habia una taperita, que encontramos rodeada de pircas.




Almorzamos y partimos hacia La Carolina. Analia nos habia reservado el turno, asi que cuando llegamos solo tuvimos ques esperar un ratito. Los chicos se divirtieron con el Minumento al Chizito ( o al minero).

Alli nos explicaron que deboamos colocarnos unas bolsas de plastico antes de ponernos las botas de goma, ademas de los cascos. Los chicos, en realidad todos, estabamos ansiosos.




La villa turística La Carolina data de 1792, año en que fue fundada por el entonces Marqués de Sobremonte, en honor a la esposa de Carlos III de España.

Este antiguo poblado tuvo su auge a mediados del siglo XIX, cuando un casual descubrimiento generó la más descabellada fiebre de oro que sufriera el país.

Muy pronto, la incipiente actividad minera generó que compañías inglesas y españolas llegaran hasta la región para extraer el oro que se albergaba en las montañas, eclipsando por completo la tradición pastoril y ganadera de la zona.

Alrededor de esta labor, comenzaron a construirse viviendas de piedra junto a calles angostas que culminaban en oscuros túneles, donde los mineros se adentraban en busca del mineral. Juan Crisostomo Lafinur naciò allí, hijo de quien fue el encargado de registrar el oro que salía de la mina.

Antes de llegar a la boca de la mina, nos mostraron el lugar dónde descansan los restos de Lafinur, lejano pariente de Borges ( hay más info). Lis restos los repatriaron de Chile el 13/08/2007 y reconstruyeron su casa natal y armarin el Museo de la Poesïa.


Despúes de todas las explicaciones del caso, encencimos las lucecitas de los cascos, y entramos...






Estubo realmente muy bueno. Despuçes de volver a la oficina donde nos cambiamos, los chicos se anotaron para hacer rapell, a lo que también se anotó Lucas.







Una de las mejores anécdotas ocurrió cuando los chicos hacán el rappel, pero esa es otra historia.

Después del paseo

El viernes, después de un almuerzo reparador, algunos se fueron a hacer la siesta y otros aprovecharon la hermosa tarde para ir al río.
Frente a la playita, Damián había encontrado el lugar ideal para enfriar unas botellitas... Así que además de mate, teníamos bebida fría.






Luego del baño, esperamos para la cena, cin unos aperitivos:


A la noche, cenamos como los dioses y para el postre, seguimos eligiendo el "FLAN DE COCO". ¡Deliciosa!

Esa noche arreglamos todo, para al día siguiente ir hasta La Carolina, para hacer la recorrida en la mina de hora. Acordamos ir a la tarde, después de almorzar.

domingo, mayo 10, 2009

La cabalgata

El Viernes Santo nos levantamos temprano para empezar la aventura.
Los caballos estaban preparados, pero se dieron cuenta que no alcanzabam para todos, porque se necesitabam dos para los "baqueanos". Así que Joli avisó que no había problema por ella; Barbi y Adri decidiern lo mismo.
Los más chiquitos compartieron el mismo caballo, lo que trajo consecuencias para los más grandes. El viaje fue fantástico y probablemente los que vean las fotos no podrán apreciar lo que vivimos nosotros. El gran premio lo mereció Gustavo que se bancó las cuatro horas de cabalgata como un genio. Esperamos que el videíto les de una idea de lo que hicimos.



Nos contaron que hace tiempo que no se puede hacer el viaje hasta el Saltopor abajo, porque hay muchas cañas y hay que dejar los caballos y seguir por el río, lo que se hace muy complicado y peligroso. Llegamos al mirador, nos quedamos un rato y volvimos. Las chicas nos estaban esperando para almozzar y descansar un rato.

miércoles, mayo 06, 2009

El viaje genial a San Luis

Después de mucha planificación, llegó el gran día: el jueves 9 de abril a las 4.45, se reunieron todos los móviles en Cabani´s House.
Cada auto fue identificado con el logo creado por Joli, el fin de semana anterior.




Con los stikers identificando cada auto, y luego de haber cargado todo partimos en convoy:
* en el móvil 1( o en Bodegamóvil) Gus, Damián, Guillo, Lucas y Bru.
* en el móvil 2: las chicas con los Aldacitos y el Castrito
* en el móvil 3: Los Álvarez con Matías.
La primera parada, fue antes de llegar al paso a nivel, dónde Damián realizó su primer blopper intentando subirse al auto de Américo.
Pasamos por Vedia y después por Rufino , para hacer la promera parada en Justo Darac. Seguimos hasta que Damián avisó por MSN que se les había prendidola luz del combustible y por lo tanto habría que para en la primera estación. LLegamos con lo justo hasta cerca de San Luis Capital.
De a allí comenzamos a cruzar por el camino de las sierras hasta El Trapiche. Dejamos asentado que si no hubiera sido por Américo hubieramos terminado en cualquier lado.
Alló Joli se consagró como excelente piloto de camino de montaña, hasta tomando la punta y guiando al resto.



Luego de curvas y contacurvas, encontramos el cartel que anunciaba que habíamos llegado: eran las 12.00 hs. de Lincoln, 11 hs. hora de San Luis.
Lo primero que vimos fueron los hornos de barro, que ya estaban cocinando algo, Lo gracioso fue que el duelo del lugar, Hrabina, al verlo a Guille le dijo a si asistente: "prendé el otro horno"... JAJAJA!


Después de acomodarnos en las habitaciones, hicimos tiempo antes de almorzar. Nos indicaron como llegar al río, y Damián, muy previsor, alzó el termito para hacer un alto en el camino.
Encontramos un lugar con buena vista para "matear" con Gusta un excelente tinto.



Almorzamos por primera vez en las Verbenas y a la tarde (después de una siestita para alguno sl fuimos al río.

El calorcito hizo que los chicos aprovecharan al arroyito y los grandes,la playita para matear...






Despúes volvimos para bañarnos y preparanos para la cena. analía, la dueña, ya había rreglado todopara que al día siguiente fuéramos al Salto de la Negra Libre, en una cabalgata de cuatro horas...
 
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